La importancia de elegir la tinta adecuada para la durabilidad y calidad de tus etiquetas y documentos
Exploremos la historia de las tintas de impresión y cómo han evolucionado para ofrecer una calidad superior y mayor durabilidad.
En sus inicios los procesos de impresión se realizaban con tinta negra sobre fondo blanco. Fácil. Posteriormente se descubrieron los colores básicos: cian, magenta y amarillo. Estos colores se combinaron para crear la gama completa de colores que se utilizan en la impresión en color. Esta técnica se conoce como CMYK (cian, magenta, amarillo y negro), y se ha utilizado durante décadas para imprimir todo tipo de materiales, incluidas las etiquetas.
El proceso consiste en combinar estas cuatro tintas (CMYK) en diferentes proporciones para crear una amplia gama de colores. En términos básicos, cuando se imprimen imágenes o texto en una página, se aplica cada color de tinta en pequeñas gotas a través de un cabezal de impresión para crear la imagen completa. La precisión de los colores puede variar según la calidad de la impresora, la tinta utilizada y el tipo de papel o soporte de impresión utilizado.
Para la creación de los colores CMYK pueden utilizarse tanto las tintas pigmentadas como las tintas DYE. La principal diferencia entre ellas radica en su composición: las tintas pigmentadas están compuestas por partículas sólidas de pigmento que se adhieren al papel mediante un aglutinante, mientras que las tintas DYE son solubles en agua y están compuestas por partículas de colorante que se disuelven en líquido portador.
Las tintas DYE, también conocidas como tintas a base de colorantes, son un tipo de tinta utilizada en la impresión de etiquetas, documentos y fotografías. Estas tintas son solubles en agua y están compuestas por partículas de colorantes que se disuelven en líquido portador, lo que hace que las tintas sean más fáciles de absorber por el papel y produzcan colores más vibrantes y saturados.
En términos de la creación de colores CMYK, las tintas pigmentadas tienden a producir colores más opacos y menos saturados que las tintas DYE. Sin embargo, también son más duraderas y resistentes a los elementos, lo que las hace ideales para la impresión de etiquetas y otros materiales que requieren una alta resistencia y durabilidad. Por otro lado, las tintas DYE producen colores más vibrantes y saturados, pero son menos duraderas y más propensas a desvanecerse con el tiempo. Son más económicas pero también son más sensibles a los rayos UV, la humedad y otros factores ambientales, lo que puede hacer que los colores se desvanezcan con el tiempo. Esto las hace menos adecuadas para etiquetas y documentos que requieren una alta durabilidad y resistencia a los elementos.
la impresora ColorWorks C6500 de Epson, un equipo que utiliza tintas pigmentadas DURABrite Ultra capaces de producir etiquetas que cumplen con los estándares GHS y la norma BS5609.
GHS (Sistema Globalmente Armonizado de Clasificación y Etiquetado de Productos Químicos) es un sistema de clasificación y etiquetado de sustancias químicas a nivel internacional, creado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU). Su objetivo es armonizar los criterios de clasificación y etiquetado de productos químicos peligrosos en todo el mundo, para mejorar la seguridad en su manejo y transporte. La implementación del GHS puede variar según el país, pero en general, establece pictogramas, frases de advertencia e información sobre los peligros de las sustancias químicas en las etiquetas y fichas de seguridad. La norma BS5609 es una norma británica que establece los requisitos para la durabilidad de las etiquetas de productos químicos peligrosos en ambientes marinos. Esta norma es importante para los productos químicos cuyas etiquetas deben ser resistentes al agua salada, la exposición a los rayos UV, la abrasión y la inmersión prolongada en agua. Las etiquetas que cumplen con la norma BS5609 se consideran adecuadas para identificar productos químicos peligrosos.
ColorWorks C6500
Impresora de etiquetas en color de 8 pulgadas (con cortador automático) que ofrece un etiquetado a color, flexible y personalizado, y admite una amplia variedad de tamaños de etiqueta. La familia C6500 ofrece nuevas oportunidades para empresas que gestionan múltiples SKU y que no disponen de mucho tiempo.
El modelo ColorWorks CW-C6500Ae amplía la gama de Epson para satisfacer las necesidades de los clientes de lotes pequeños a medianos en diversos sectores (alimentación, productos químicos, bebidas, fabricación, etc.).
Flexibilidad
La CW-C6500 se beneficia de una amplia gama de nuevas características diseñadas para proporcionar soluciones prácticas y creativas. Admite anchos de papel de 25,4 mm a 215.9 mm y cuenta con un soporte para papeles ampliado, que incluso incluye papel texturizado.
En pocas palabras, la gama ColorWorks puede imprimir desde etiquetas pequeñas para botellas de líquido de vapeo hasta etiquetas grandes y duraderas para bidones de productos químicos.
Además, el innovador sensor móvil permite imprimir en cualquier forma, sin necesidad de un segundo corte de papel.
Fácil de usar
La CW-C6500 se ha diseñado para que resulte muy fácil de usar. Todas las operaciones se pueden realizar desde la parte frontal, para ahorrar espacio de uso.
La sustitución del rollo se puede hacer desde la parte frontal, derecha e izquierda. También hemos diseñado una serie de herramientas técnicas para ayudarte con la configuración, el mantenimiento y la gestión de impresoras, entre las que se incluyen: interfaz web, gestión de flotas de impresoras, configuración remota, mantenimiento y supervisión.
Contacta con nosotros para conocer más y te ayudaremos a escoger la mejor opción.